No encuentro nada más gratificante que recomendar libros de autores que aún viven y explican sus obras antes que hacer el rutinario análisis de las obras de Roa Bastos, Elvio Romero o Casaccia sin desmeritar (de ninguna forma) lo que nuestros literatos representan al mundo.
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| Varadero de Ña Cande. Foto: Facebook. |
Siempre el hombre ha disfrutado de literatura que hable mucho sobre los llamados "placeres mundanos" y quien diga que eso es una tendencia moderna, entonces es porque Vatsyayana es desconocido para el mismo. Como un ensayo, nos dibuja con recomendaciones las mejores maneras de convertirse en un Dios del sexo; Cassanova es otra prueba viviente y llegamos a citar Pantaleón y las Visitadoras, Memorias de mi Puta Triste, Memorias de una Geisha entre otras obras inmortales.
Decir que las sombras de Grey ingresa en el selecto grupo literario-erótico parecería muy precoz; sin embargo, una obra paraguaya de un escritor moderno (no confundir con modernismo), sin tapujos técnicos y con una estética que seduce ha demostrado que lo tildado como vulgar es también un arte.
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| Una foto ochentosa del escritor. |
El Varadero de Ña Cande. Una historia donde la literatura, la historia y la realidad se encuentran. el Varadero, lugar donde marineros, hombres solitarios, esposos, viudos, locos, políticos iban a buscar el amor de una mujer...pagada; al decir sin tapujos me refiero a un desfile de palabras que describe un acto sexual pero lo pinta como si fuera el nacimiento de Venus o una sesión de fotos a la mismísima Marilin Monroe;
Victorio Suarez, tanque con municiones de la literatura paraguaya, en lo que yo considero su mejor relato hasta el momento juega con el erotismo, la pasión y por sobre todo muestra que dentro de las letras, hay un Paraguay no explorado por la literatura. Feliz día del libro.
